Me encantó el entorno porque es completamente diferente , se llama Selva Negra por lo frondoso que es y una vez allí te quedas encantada con sus casas de madera y un estilo de vida mucho menos estresante. Si vais no busquéis un hotel urbano, adentraros en lo mágico de la selva y elegir un hotel alejado q sólo respire naturaleza!!
Ni que decir la cantidad de pueblecitos q puedes visitar y si es a partir de noviembre….todos decorados con motivos navideños, es espectacular!!


