El Embalse de Chandrexa de Queixa ofrece paisajes bucólicos donde disfrutar del tradicional ambiente rural del interior de Galicia
Una de las razones por las que nos gusta volver a Galicia una y otra vez es porque esta increíble región española siempre tiene algo nuevo que ofrecernos. Lejos de los destinos más turísticos y conocidos, cada una de las provincias gallegas esconde verdaderos trocitos de paraíso que parecen jugar al escondite por lo recóndito de su paradero, rinconcitos cuyo acceso no siempre se presenta fácil pero que sin duda ofrecen una mayúscula recompensa paisajística .
Uno de estos lugares es el Embalse de Chandrexa de Queixa, en la localidad ourensana del mismo nombre. Nos encontrábamos recorriendo la comarca de Trives y en la Oficina de Turismo de A Pobra de Trives nos hablaron de este lugar. La amable guía nos aseguró que el entorno de Chandrexa de Queixa ofrecía mucho encanto natural y bien merecía una visita.
Eso sí, nos advirtió que la carretera no era para ir a 100 km/h. 😉
Embalse de Chandrexa de Queixa
Llegamos al pueblecito sin pérdida alguna y casi de bruces nos encontramos con el cartelito que indicaba que el embalse se encontraba a la derecha… Un sencillo giro de volante y ¡ta chan! ¿Qué te parece? 🙂
¡Pero qué maravilla! Ante nuestra mirada de asombro, un bucólico paisaje rural de verdes prados y un puñado de casitas bajas asomándose a las tranquilas aguas del Embalse de Chandrexa de Queixa. Un entorno de relax y desconexión donde el inmenso silencio tan sólo era interrumpido por el repique de alguna campana o por los ladridos y mugidos de las vacas que yacían tranquilamente, ajenas a las visitas.
No había ninguna duda, nos encontrábamos en pleno corazón de Ourense, donde la vida se vive de forma distinta. Sosegada, sin prisas, sin agobios… Un paraje que reflejaba la máxima expresión de belleza natural gallega, un lugar donde lo único que debes hacer es respirar profundamente y disfrutar de tu alrededor. 🙂
El Embalse de Chandrexa de Queixa, si bien podría pensarse que es un laguito creado por la madre Tierra, lo cierto es que lleva sello humano. Su datación es de 1953, año en el que se terminó de construir la presa que cumpliría su función hidroeléctrica aprovechando el cauce del Río Navea.
Ruta circular por la ribera del embalse
A la izquierda, una pequeña indicación nos señalaba el comienzo de una ruta circular por la ribera del embalse, un itinerario de aproximadamete 30 km que atraviesa las diferentes aldeas y pueblecitos de este, si nos permites, mágico lugar.
Nos pareció una ruta de lo más apropiada para contemplar el embalse desde todos sus ángulos. 😀
Vilar, A Senra, A Quinta, Castelariña, A Espasa,… pueblos y aldeas en lo más inhóspito de Galicia guardando esa esencia familiar y acogedora que tanto caracteriza las tierras gallegas.
El recorrido estaba siendo de lo más agradable, a una media de 10 ó 20 km/h, parándonos en cada ensanche de la carretera y esquivando a más de un perrito que aparecía delante de nosotras, ladrando con todas su fuerzas, cada vez que cruzábamos un pueblo nuevo… 🙂
Cruzamos un pequeño puente allá donde el curso del embalse se presentaba más estrecho y aprovechamos el espacio que había a un lado de la carretera para hacer un descanso y, ya de paso, inmortalizar la belleza paisajística que teníamos frente a nosotras. Las quietas y nítidas aguas del embalse hacían de espejo y el cielo, con sus pomposas nubes blancas, se reflejaba en él.
No recordamos el tiempo que permanecimos allí; completamente ensimismadas ante el lienzo de verdes y azules que había dibujado la naturaleza.
Continuamos nuestro camino hasta llegar nuevamente a la localidad de Chandrexa de Queixa. En total había sido casi hora y media de deleite multisensorial que había conseguido ¡enamorarnos aún más de la mágica Galicia!
Estábamos pletóricas con el consejo que nos habían dado en la Oficina de Turismo. A nosotras, que nos fascina el mundo rural y la idea de las escapaditas improvisadas, ¡nos había parecido un rinconcito deslumbrante! 🙂
En vuestra próxima visita en Chandrexa de Queixa, os recomiendo que probeis a perderos un poco más por la sierra, desde el centro de chandrexa (Celeiros) seguir la carretera a Forcadas y Requeixo, son solo 5 kilómetros hasta la parroquia de Requeixo, es uno de los pueblos más altos de Galicia y incluído en la red natura 2000, un lugar con mucha historia, habitado por 4 o 5 familias ganaderas, no se aprecia el embalse desde allí porque da hacia las montañas del parque del invernadoiro, todos los picos del mazizo se aprecian con gran esplendor, incluído el de cabeza de manzaneda, pero las vistas os dejarán alucinados
Hola Rafa!
Muchísimas gracias por tu sugerencia, la verdad es que ese día no teníamos más tiempo, viendo tal belleza natural estamos seguras que si nos adentramos y profundizamos un poquito más por donde nos comentas encontraríamos lugares increíbles!! Esperamos volver pronto! Un abrazote!