Acompañamos al río Manzanares a su paso por La Pedriza. Una deliciosa ruta de senderismo que finaliza en el bonito entorno natural de la Charca Verde
Esa fue la frase que motivó nuestra última escapadita por la Sierra de Madrid. 🙂 Lo cierto es que ya empezábamos a sentir un considerable anhelo de naturaleza, de sentir esa sensación de libertad reconfortante que proporciona el recorrer las sendas de nuestros bosques con la única compañía de la fauna que lo habitan.
Sí, definitivamente, subir a la Charca Verde era muy buena idea. Por fin íbamos a conocer uno de los enclaves más famosos de La Pedriza y de los más increíbles del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.
Alojamiento en Manzanares el Real
La Charca Verde es perfecta para una excursión de un día, pero si te apetece quedarte por la zona, una posibilidad es alojarte en alguno de los coquetos alojamientos de Manzanares el Real. En ese caso, los Apartamentos Piedra Libre -con piscina- son una opción que te recomendamos. Fueron nuestra elección para un finde veraniego y estuvimos de auténtico lujo.
Nos vamos a la Charca Verde
Ataviadas con el kit de senderismo y los víveres necesarios para pasar el día, pusimos rumbo a Manzanares el Real, puerta de acceso principal de La Pedriza y de todo el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.
¿Para llegar desde Madrid? Muy fácil, 50 km por la M-607.
Tramo Centro de Visitantes – Canto Cochino
Como detallamos al final de este post, de las dos opciones que hay para acceder a La Pedriza, nosotras optamos por llegar al aparcamiento de Canto Cochino a través del Sendero de Quebrantaherraduras, el cual parte del mismo Centro de Visitantes. El autobús esta a puntito de llegar, pero… ¿no habíamos venido a caminar 🙂 ?
¿Distancia y tiempo? Aproximadamente unos 5 kilómetros que se recorren en una hora y media, aunque todo dependerá del ritmo de cada uno. 😉
El Sendero de Quebrantaherraduras ofrece formidables vistas de La Pedriza y de todo su entorno mientras discurre entre bosques de coníferas y matorrales. Una opción apta para cualquier persona con un mínimo de preparación física y que resulta verdaderamente agradable en primavera y otoño. 🙂
Apenas habíamos caminado 200 metros cuando avistamos una ardilla roja juguetona que había decidido cambiar de arbolito.
Nos mantuvimos inmóviles observándola para no entorpecer su camino. ¡Era adorable! La verdad es que hacía bastante tiempo que no veíamos uno de estos simpáticos animalitos merodear por el bosque. 🙂
Tras el alegre encuentro, continuamos nuestra marcha asomándonos a las ventanas naturales que el sendero nos regalaba. Los intensos verdes de la vegetación cercana se entremezclaban con los azules de las montañas más alejadas y los puntos blancos de los hogares de la sierra… Sí, definitivamente, ¡anhelábamos mucho estos paisajes tan espectaculares!
Pinos resineros, cipreses de arizona, matorrales aromáticos,… Un verdadero desfile de especies autóctonas que apaciguaba el calor y nos permitía avanzar plácidamente.
Tras dos cruces de carretera y una moderada pendiente -nuestras piernas se hicieron buen eco de la misma-, llegamos a la zona conocida como Collado de Quebrantaherraduras -1081 metros-. Un lugar en el que merece la pena detenerse para contemplar la extraordinaria vista de La Pedriza y, ya de paso, tomar un poco de aliento… 😉
Un descansito que sienta de vicio y te prepara para seguir deleitándote con el resto de singulares parajes que la travesía va deparando…
Casi hora y media después, habíamos llegado al famoso parking de Canto Cochino, ahora tocaba poner rumbo ¡a la Charca Verde!
Tramo Canto Cochino – Charca Verde
Pues ya estamos en Canto Cochino. Ahora teníamos la opción de seguir la carretera -camino más cómodo pero menos atractivo- o subir pegaditas a la ladera del río Manzanares… Por supuesto, elegimos la segunda opción. Lleva algo más de tiempo, pero la belleza del entorno ¡bien lo merece!
¿Distancia y tiempo? Aproximadamente unos 2 kilómetros que pueden hacerse fácilmente en 45 minutos. 😉
Para tomar la ladera del río tan sólo tenéis que dirigiros al siguiente aparcamiento –Parking La Rana-, el cual está a 2′ del de Canto Cochino, carretera arriba. Allí tras cruzar un puentecito de madera deberéis continuar dejando siempre el río a la izquierda. 😉
Pasito a pasito fuimos ascendiendo sierra arriba. Caminábamos al cobijo del caluroso astro solar, descubriendo toda la gama posible de tonos verdosos y siempre con la imponente compañía de las montañas de La Pedriza…
El paisaje era verdaderamente delicioso, un sugerente cocktail multisensorial al que se sumaban los discretos saltos de agua y las improvisadas piscinas naturales que lucían espectaculares por el reflejo de los rayos del sol…
Sí, definitivamnete valoramos muy positivamente la prohibición de bañarse en todo el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.
El privilegiado paraje protegido necesita recuperar todo su esplendor natural para que podamos disfrutar siempre de la increíble riqueza de flora y fauna acuática que habita en él. 🙂
Había transcurrido algo más de media hora cuando llegamos a un punto en el que nos resultaba muy complicado continuar. El camino parecía haberse acabado y el terreno se volvía cada vez más abrupto, sabíamos que estábamos muy cerquita pero no lo veíamos claro. ¿Solución? Cruzar el río por una de las zonas que lo permitía y terminar el trayecto por la carretera. Unos segundos antes habíamos visto a la guardia forestal pasar con su todoterreno.
De alguna manera, subir hasta la Charca Verde nos estaba pareciendo una especie de gymkana. Era un poco desconcertante pero también ¡tenía su punto de divertido! 🙂
Pero no os creáis que aquí acabó todo… jejeje. Una vez en la carretera y después de avanzar unos 500 metros seguíamos sin saber muy bien dónde estaba la ansiada piscina natural. Menos mal que vimos a un runner y le pudimos preguntar…
Nuevamente en el bosque llegamos a una amplísima zona abierta de enormes rocas teñidas parcialmente de un fuerte color antracita.
Una consecución de pilones salpicada de arbustos y matorrales por la que el caudal del río se deslizaba a sus anchas colina abajo. Un paisaje de extraordinaria belleza que nos dejó con la boca abierta. 🙂
De no ser porque Mar había visto fotos previas, hubiéramos pensado que ese área era la Charca Verde… Al no verla por ningún lado, preguntamos nuevamente a unos chavales que acababan de llegar con su bici.
Teníamos que seguir ascendiendo por las angostas rocas, el ansiado lugar estaba justo detrás…
¡Ta chan! ¡Por fín! Ahora sí. Ante nosotras la señora Charca Verde. 😀
En pleno agosto, 40 grados y atención… ¡No había nadie! ¡Alucinante! Nunca hubiéramos imaginado deleitarnos con este lugar con tanta intimidad.
Parece mentira que hasta el año pasado, este rincón de la sierra madrileña, fuera un devenir de neveras y veraneantes en busca de un huequito donde ahogar la calor…
La prohibición le ha sentado de lujo a La Pedriza. ¡Así sí mola visitar la naturaleza! 🙂
Horarios de acceso a La Pedriza
El primer espacio habilitado para dejar los coches es el propio parking del Centro de Visitantes. No tiene ninguna restricción de acceso salvo las que imponga la propia disponibilidad de huecos libres.
Una vez ahí, existen dos opciones:
1ª – Seguir la carretera hasta llegar a cualquiera de los otros parkings disponibles, entre los que se encuentra el popular parking de Cantocochino. La única salvedad de esta elección es que presenta restricciones de acceso.
Para entrar
- Barrera abierta de 07:30 a 09:30 y de 18:30 a 22:30
- Barrera cerrada de 09:30 a 18:30 y de 22:30 a 07:30
Para salir
- Barrera abierta de 07:30 a 23:00
- Barrera cerrada de 23:00 a 07:30 (los vehículos no pueden permanecer en los parkings de noche)
Para aliviar estas restricciones, durante los fines de semana y festivos, está disponible un autobús lanzadera totalmente gratuito que conecta las zonas Manzanares el Real – Centro de Visitantes – Parking de Cantocochino en ambas direcciones. Estos son los horarios.
2ª – Hacer el trayecto del Centro de Visitantes a Cantocochino a pie a través de la senda señalizada con marcas blancas y amarillas que da comienzo detrás de la caseta. Es un trayecto sencillo de unos 5 km que te llevará sobre 1 hora y 30 minutos.
Esto es justo lo que hicimos nosotras. 😉
Me ha encantado el post!
Una pregunta, ¿cuanto tiempo y distancia hay desde el centro de visitantes hasta la charca?
Hola Paco!!
Nos alegra mucho que te haya gustado! Es una ruta muy agradecida y, sin duda, una de las zonas más bonitas de la Sierra de Guadarrama.
Con respecto a tu pregunta, en total son unos 7 km aproximadamente, 5 hasta el parking de Canto Cochino (yendo por la senda) y 2 más desde el parking hasta La Charca (por la ladera del río). Y en tiempo, pues entre 2 horas y dos horas y media, depende del ritmo y si vais con peques. Lo que sí, es una rutita muy sencilla y que no necesita una especial preparación.
Seguro que os gusta mucho! Ya nos contarás qué tal!
Un abrazote, Eli